SALVAR AL SOLDADO BELL

(abril 2018 - agosto 2021)

Me pregunto si algún día dejaré de escribirte,
me pregunto si algún texto logrará describirte.

En el fondo, ya sabía que duele igual el lamento por lo que no se hizo
que la nostalgia de lo que se ha hecho y no se volverá a repetir;
para ti, fue una experiencia más,
para mí, un boquete que sumar.

No sé si tengo la mente en blanco
o reproduzco en bucle el silencio posterior a tus últimas palabras;
te mostré lo que te ibas a perder,
viste lo que te ibas a ahorrar;
mis ofrendas son naturaleza muerta,
mis buenas maneras, rosas de arena,
un esqueleto relleno de piel,
tampoco nadie sufrió por él,
nadie corrió a salvar al soldado Bell.

Puedes ser frágil
y no ser débil;
ver más descanso bajo una almohada
que encima de ella;
envenenarte los sentidos
con un banquete malherido;
reconocerte en un libro abierto
y vacío de páginas.

No cura,
solo escuece
las más de las veces;
"eliminar para mí",
"eliminar para todos",
sobretodo para ti
si averiguo cómo.

TIEMPOS REVENIDOS

(noviembre 2019 - enero 2021)

Yo creo que yo pienso
que me han dicho que he leído
que a este mundo hemos venido a enfermar,
la experiencia solo es un estropajo.

Cadáveres permanentes
en desarrollo atroz
concretando malestares
que rehúsan reacciones:
saberse impotente y sentirse poderoso.

Tanto optimismo con el futuro
en lugar de con el presente...
me da igual que la gente sea desgraciada,
el problema es que sea desafortunada;
bailan como idiotas que niegan que los tiempos, si vuelven,
vuelven revenidos.

Desaparece el rastro de la poesía
cuando pierde su significado,
o lo sepultan palabras sanas;
y con las agudas hacen flores,
con las esdrújulas persianas.

Quien tiene boca, tiene un vertedero,
el vertedero de su propio cerebro,
y ¿qué más da que lleves bozal?
si nunca has intentado hablar,
pues no tenías nada que decir,
pues no te iba tan mal,
y dónde estaba el problema
de tu vida normal;

bienvenido a lo ajeno
y a la cronificación estructural.

TURISMO DE INTERIOR HUMANO

(abril 2018 - enero 2021)

El hombre que habla solo
se ha comprado un móvil para disimular;
el carnicero prepara encargos,
la radio le invita a cantar;
un enajenado sortilegia con sus dedos,
está contando demonios,
y se mueven tanto
que tiene que volver a empezar.

Señoras charlando con conocidas,
y sus hijas, al lado, aburridas;
alumnos de la escuela Jerónimo Basora,
los que, en lugar de petaca, llevan cantimplora;
"Walk on the wild side", escribe quien solo puede balbucear
después de que le mutilaran la lengua de un mordisco
en una noche de descontrol psicotrópico.

Si el mundo se tambalea, agárrate a mí,
nos haremos compañía en la caída
hacia una luz que no es la de un nuevo día,
o quizá logres impulsarte,
porque mi vida es tu circunstancia.

Es verdad, puede ser
que dar vapulee a tener,
pues a cuántas cosas la importancia que se les da
somete a la importancia que tienen:
al mejor y al peor;
al más y al menos;
al múltiple y al dividendo;
al para, al por y al según.

Afortunado quien no alcanza sus sueños,
luego no desmitifica sus fantasías.